Texto – 16.II. El poder de la santidad
Existe una tendencia a fragmentar, y luego a ocuparse de la verdad de una pequeña porción del todo. Eso no es más que un intento de evitar el todo o de no querer contemplarlo, concentrándote en lo que crees que te sería más fácil entender, lo cual no es sino otra manera en la que aún tratas de limitarte a tu propio entendimiento.