Lección 214
No soy un cuerpo. Soy libre.
Pues aún soy tal como Dios me creó.
1. Pongo el futuro en Manos de Dios (194).
El pasado ya pasó y el futuro aún no ha tenido lugar. Ahora me he liberado de ambos. Pues lo que Dios da sólo puede ser para el bien. Y acepto únicamente lo que Él da como lo que me pertenece.
No soy un cuerpo. Soy libre.
Pues aún soy tal como Dios me creó.